SIL México

Mixteco del norte de Tlaxiaco
(código xtn de la ISO)

Faja

 

El mixteco del norte de Tlaxiaco es una de las variantes del mixteco de la Mixteca Alta occidental. Esta lengua se conoce como sa'an ñuu savi, que quiere decir “lengua del pueblo de la lluvia” o sa'an savi, que quiere decir “lengua de la lluvia.” El territorio tradicional en donde se habla esta variante es la región que se encuentra al norte de la ciudad de Tlaxiaco en el estado de Oaxaca.

Ubicación en México
Área en que se habla la lengua

 

El mixteco del norte de Tlaxiaco se habla en los municipios colindantes de San Juan Ñumí, Santiago Nundiche, San Sebastián Nicananduta y San Antonino Monteverde, cuyas formas de hablar se agrupan bajo el mismo código [xtn], aunque lingüísticamente se diferencían entre sí. Según el censo de 2000, estos cuatro municipios cuentan con el siguiente número de hablantes de la lengua:

    Población
total
Hablantes de
lenguas indígenas
Hablantes
monolingües
 
  San Juan Ñumí 5974 5872 953  
  Santiago Nundiche 916 887 120  
  San Sebastián Nicananduta 1458 684 46  
  San Antonino Monteverde 5217 5155 988  

 

El área en donde viven los hablantes de esta lengua es muy montañosa; tiene una elevación de aproximadamente 2000 metros y es hermosa por los pinos y ocotes, los ríos y las peñas. Las casas tradicionales son de vigas techadas con láminas, tejas o paja de pino.

Casa de vigas
Techo de paja
Borregos y chivos

La gente cuida reses, borregos y chivos, y crían pollos y guajolotes. Siembran maíz, trigo, frijol, calabaza y jitomate en campos inclinados o en terrazas.

Arando el terreno
Ganado en el campo

La gente también hace artesanías. Fabrican diferentes tipos de ollas de barro. Tejen sombreros, petates, tenates, soyates y capizayos de la palma natural. La palma no se da en la región y es necesario comprársela a la gente de pueblos situados más al oriente.

Ollas
Cosas de palma

 

Rasgos lingüísticos

Esta sección está escrita de acuerdo al habla del municipio de San Juan Ñumí, y algunas estructuras gramaticales o léxicas pueden ser diferentes a las de cualquier de los otros pueblos de la región.

 

Una lengua tonal

El mixteco es una lengua tonal[2], es decir, el tono o nivel de la voz hace la diferencia entre las palabras que tienen las mismas vocales y consonantes. Esta variante del mixteco tiene tres niveles contrastivos de tono: alto (á), medio (ā) y bajo ().

  kuáán ‘amarillo’ (alto alto)
  kuāān ‘comprar’ (medio medio)
  kuāa̱n ‘madurar (trigo)’ (medio bajo)

 

En el mixteco se dice que el tono alto se pronuncia kuiñi (estrecho) o más agudo. Se puede decir que el tono bajo se pronuncia ka'nu (grande) o más abierto. En un canto, el tono alto es kasi (cerrado), el tono medio es tau (mediano) y el tono bajo es ndee (grueso).

Para algunos verbos el tono es la única distinción entre el aspecto potencial (acción que no ha empezado) y el aspecto continuativo (acción que continúa en el tiempo presente).

  ká'a̱n sa̱n ‘yo diré’ (alto bajo bajo)
  ká'ān sān ‘yo digo’ (alto medio medio)

 

El tono es la única distinción que hay entre los números uno y nueve. Casi todos los números básicos tienen el mismo patrón de tonos: alto, bajo.

  íín ‘uno’ (alto alto)
  úu̱ ‘dos’ (alto bajo)
  úni̱ ‘tres’ (alto bajo)
  kúu̱n ‘cuatro’ (alto bajo)
  ú'u̱n ‘cinco’ (alto bajo)
  íñu̱ ‘seis’ (alto bajo)
  úja̱ ‘siete’ (alto bajo)
  úna̱ ‘ocho’ (alto bajo)
  íi̱n ‘nueve’ (alto bajo)
  úxi̱ ‘diez’ (alto bajo)
  xá'u̱n ‘quince’ (alto bajo)
  óko̱ ‘veinte’ (alto bajo)

 

A veces el tono es la única distinción que hay entre los pares de palabras que están relacionadas entre sí.

  tnúú ‘negro’ (alto alto)
  tnúū ‘tizne, hollín’ (alto medio)

 

Algunos pares de palabras diferentes son homófonos; son palabras que suenan exactamente igual, incluso en sus tonos, pero que tienen sentidos distintos: māā dē “él mismo”, “la misma agua”; yuá'a̱ “hilo”, “hielo”; kúchí “bañarse”, “mascar.”

Los morfemas para el aspecto progresivo y el negativo son homófonos; los dos suenan exactamente iguales. La frase má kāā nī significa o “suba usted” o “no suba usted.” En esta situación, la única manera de saber si uno debe subir o no (por ejemplo, a un carro) es mirar bien al hablante. Si afirma con la cabeza o abre la puerta del carro, entonces sus palabras significan que debe subir; o si niega con la cabeza, indica que uno no debe subir.

En el siguiente conjunto de palabras, las palabras que significan “rojo” y “el lado derecho” son homófonas.

  kuá'á ‘rojo’ (alto alto)
  kuá'á ‘lado derecho’ (alto alto)
  kuá'a̱ ‘mucho’ (alto bajo)
  kuā'a̱ ‘hermano del sexo opuesto’ (medio bajo)

 

Algunas frases resultan homófonas porque el tono de una palabra puede producir cambios en las palabras siguientes. En los siguientes ejemplos el tono de la palabra que significa “carro” afecta a los tonos de las palabras que significan “rojo” y “la hermana de hombre,” haciendo que se vuelvan homófonas en este contexto.

  kārrú kuā'ā dē ‘su carro rojo (de él)’
  kārrú kuā'ā dē ‘el carro de su hermana’

 

Los difrasismos

En el mixteco se usa una amplia gama de difrasismos, es decir, pares de sinónimos con repetición de las partes iniciales de las palabras (aliteración). Forman una parte importante de la poesía y retórica mixteca. Algunos difrasismos comunes son:

  koo ini koo anu ‘estar adentro’ + ‘estar en el corazón’ = “estar dispuesto o decidido”
  kuanyu'u kuandetu ‘cerrar la boca’ + ‘obedecer’ = “sujetarse”
  ni kuii ni kani ‘todo momento’ + ‘todo lo largo del tiempo’ = “para siempre”

 

—Peter y Laura Gittlen
Fotos por Laura Gittlen

 


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